Deliciosamente provocados

Me gusta provocarte y que me provoques… .
Me gusta provocarte porque sabes cómo mirarme… como desearme, como hacerme tuya…
Que por un segundo desees desnudarme, rápido y violento… otras veces lento y con calma… y cuando por fin llegas… mi mirada es de niña… y de mujer…
Y te vuelves tierno, me abrazas, me besas, comienzas a desnudarme…
Me gusta provocarte porque sabes cómo acercarte. Hoy vienes a verme y a acompañarme y en el momento menos pensado suspiro en tu cuello, rozo tu cuerpo, te beso…
Y hoy, puede ser…
Me gusta provocarte, y está claro que siempre vuelves, que siempre vuelvo, que hay algo vivo que nos mueve a buscarnos.
Y tú como yo lo sabemos, y nos gusta, y provocamos el encuentro cada día… sin saber si hoy será, o no…

Recuperandome



Todo empezó como un domingo cualquiera de resaca. Un típico día de ésos que una no se da cuerda.
Pero no era la resaca de cuando en la disco la noche anterior te has tomado mas copas de la cuenta. Era mucho peor,,, lo que yo tenía sí que era un trancazo y no lo de Nacho Vidal (obviamente) y para mas inri, acompañado de la señora de rojo que me visita todos los meses.
Normal que esté griposa,,, de la humedad que hay en mi casa a veces hasta me parece oír de fondo la música de Tiburón y el aire acondicionado ha contribuido bastante.
Hice lo que una hace en estos casos: hacer acopio de síntomas y buscar en internet... Según la primera búsqueda, tenía una de esas enfermedades que son todo consonantes... La cosa no parecía tener remedio. La segunda búsqueda fue aún peor: descaradamente Internet me estaba recetando enfermedades incurables para ver si me suicidaba... Como tenía la garganta muy chunga, la cosa parecía que tenía que ver con el tabaco. Hombre, sí, fumo, pero si el tabaco matara tanto como dicen, Bush bombardearía con Lucky Strike y no con bombas H (que se llaman así porque son como las hipotecas: podrán caer sobre la casa una sola vez, pero sus efectos en las personas se notan durante varias generaciones).
Aunque es cierto que tengo en la familia un caso de un tío mío que murió por causa del tabaco. Bueno, en realidad no estoy seguro de que fumara, pero recuerdo de pequeña escuchar que por Fortuna se había muerto... Y lo peor es que todas estas enfermedades daban unos síntomas u otros según la persona. Porque ya se sabe que cada persona es única... exactamente igual que todas las demás.
Además, el hecho de que no tuviera alguno de los síntomas tampoco significaba que no tuviera dicha enfermedad, como el simple hecho de que estés paranoica no significa que nadie te persiga. Pero yo tenía la cara de Risto Mejide en un karaoke, así que juré que no me volvería a mirar en el espejo para evitar tenerme que suicidar en defensa propia. Al borde de la muerte, comencé a pensar en temas transcendentales. Dios es uno de mis personajes de ficción favorito, pero no puedo negar que probablemente él sea mi pastor, porque soy una cabrita. Lo que siempre me ha hecho un lío es que,,,, si dios es la respuesta, ¿cuál es la pregunta?.
Así que decidí preguntar por tercera vez a Google y de repente, en mi pensamiento místico, me sentí como la ermita de mi pueblo porque, como yo, ella tampoco tenía cura.
Yo, que siempre me he caracterizado por vivir a tope, decidí pasar los últimos momentos de mi vida viendo la tele. Lo bueno de la televisión es que produce tanta basura que la están constantemente reciclando. Hubo un momento en que no sabía si aquello era un debate o una investigación científica para descubrir si había vida inteligente en el plató de "hombres, mujeres y viceversa"... Y me quedé dormida, como es lógico. Tan lógico como que si te acuestas con picor de culo al despertarte te huele la mano a mierda... Al despertarme, ya de madrugada, la tele estaba mostrando una selección de los mejores momentos de Pene de muerte, 20.000 lenguas de Viaje intrauterino, Sé lo que os hicísteis últimamente en el ano y otros grandes éxitos del cine más cárnico.
En el estado terminal en el que me encontraba sólo le pedía a dios que ya que me había quitado las fuerzas, que también me quitara las ganas. Pero no pude evitarlo... en vez de dormirme, me sobé... Y es que me gusta más el roce que a un chapista,,, y al final me tuve que poner a jugar con el Power Ranger rosa. Y oye, aunque siempre es más divertido lo de la paja en el ojo ajeno, aquello, está mal que yo lo diga, fue mano de santo.
Yo creo que vistos los resultados, tendrían que aplicar este método de curación por imposición de manos en la Seguridad Social... Y es que, si ésta fuera una disciplina reconocida médicamente, lo primero que harían los seguros de pago sería convertir todos esos clubs de chicas de mente despejada y de vida alegre, en centros de día... no??

penetraición de la invaginación

Estoy perdida en mitad de un local abarrotado de gente, cuyo aliento ppodria encender una cerilla con solo acercarse a ella, incapaz de dislumbrar la punta de mis zapatos, ni de diferenciar los sonidos que emite el baboso que tengo pegado a mi oreja.
Me acerco a la puerta para confirmar que sigue lloviendo,
y cada vez llueve más fuerte,,,
al momento siento la atracción de una fuerte presencia que proviene de la acera de enfrente,,, un chico fuerte, con perilla, bastante rapado y muy tatuado, esta a punto de entrar en el local. Entonces pienso: ummm.. "es mejor que me quede, la calle esta imposible"

Mientras me dirijo al baño, voy buscando con la mirada al desconocido que me ha impresionado.
El servicio de "mujeres" esta lleno y sin pensarlo un segundo entro rápidamente en el de "hombres", escucho unas voces y no puedo resistir mirar a través de la estrecha ranura de una de las puertas,,,, me sorprendo al descubrir que es mi vecinito lamiéndose los labios con el atractivo desconocido!!!, parece que se conocen bastante bien diría yo... intuyo que el es argentino por su acento y mi vecino, es un futuro "Victorio & Lucchino", también se que es fan de Amy Winehouse...
me vence el morbo y hecho silenciosamente el pestillo a la puerta de entrada.
No puedo dejar de observar como sus manos recorren su cuerpo y como se hablan mientras lo hacen. Y me recreo escuchando:

"-.Quiero que dejes caer tu camisa lentamente, que me enseñes tu torso desnudo, me deleites con tu cuerpo de Adonis, deseo ese pene que me muestras, sentirlo dentro pero también sentirlo en mi boca, llenar mi vacío contigo... Desnúdate, aquí no hace frío.

"-.No quiero hablar esta noche, ya hemos hablado bastante... sólo quiero besarte, besarte, besarte... y sentir tu aliento en mi nuca, entrecortado, intenso...
Deja que ponga mis manos en tus nalgas, que me acerque a ti, que te excite y contemple esa excitación... Pero, no, ni tocarme... Soy yo quien decide cuándo y cómo y aún no he decidido darte permiso para gozar... Y es que has cometido un error al pensar que ibas a poseerme... Voy a ser yo quien te domine...

-A todo esto, yo estoy atónita contemplando estas prodigiosas escenas y no se aun quien será el dueño de la situación. Ansiosa, sigo ansiosa de ver mas.
Parece que no hay pausa en este trayecto y la voracidad del deseo de otros se destiñe en mis manos.
No podéis estar más unidos, dos cuerpos formando un solo lazo sudoroso, parece no ser suficiente, os deslizáis sobre vuestro pecho, muslos entre muslos, vuestros sexos uno contra otro, a punto de explotar, dedos entrelazados, lenguas buscándose, labios doloridos de tanto estrellarse. Percibo sus sensaciones veo como sus sexos se endurecen al contacto de caricias que saben perfectamente lo que hacen y tengo que hacer esfuerzos por no hacer ruido,,, aunque la verdad es que podríamos estar en medio de un estadio y me daría lo mismo porque soy absolutamente esclava de los movimientos que sus labios realizan. Veo sus manos enquistadas en sus cuerpos, la saliva recogida como mar sobre su lengua... Golpes y jadeos...
Y así continúa, hasta que entre los estertores del clímax mi voz oculta gritó:
.- mil noches lo recordaré y mil mas me masturbaré rememorando este momento.

detenida...


SÁBADO... apareciste de la nada, mientras yo andaba de madrugada por aquella calle oscura, con mis tacones de vértigo sobre los charcos de agua que había provocado la lluvia una hora antes de encontrarnos.

Tu imagen seria, casi rozando un pose soberbio, me sedujo pero... quería demostrarte que lo que menos me importaba, era que me impresionabas con tu traje de policía.

Insistías estrictamente que te acompañara a comisaria para denunciarme por pasear sin d.n.i,,, me pareció ridículo y mis risas, encendieron tu fuego... me agarraste fuerte del brazo y con tu maldita y macabra manera de imposición policial, me hincaste en el asiento del coche....

tu silencio significa que da igual lo que te diga y asumo la situación. Durante el camino agudizo mi vista para que no se escapen tus movimientos y pueda entenderlos... ahora se que me crucé en tu camino y has decidido usar tu poder para llevarme a este Hotel... no me atrevo hablar, mis ojos están fijos en ti, en tus perfectos movimientos, y tu seguridad.

En el ascensor, el temor retoma mi alma cuando te acercas a mi, noto como vibra el suelo bajo mis pies mientras rodeas mi cuello con los brazos, tus labios rozan los mios con una leve caricia, tus manos se deslizan por mis muslos acariciándolos a la vez que suben mi vestido, dejas dibujados tus dedos en mi cintura, me estremezco, mi cuerpo se mueve con vida propia intentando acercar mi boca a tus labios, quiero sentir tu lengua... Sigues con la hazaña de dejarme desnuda. Me despojas de esta prenda negra y quedo expuesta a tus ojos, tan solo con un minúsculo tanga que enseña más que cubre, y allí se centra tu atención.

Nuevamente los protagonistas son tus dedos, viajan por mis labios, bajan por mi barbilla, mi cuello, cruzan mi ombligo y llegan hasta la transparente ropa íntima,,, vibro al sentir la presión de tu arma, y la humedad cubre mi piel. Mi respiración agitada se confunde con la tuya, tu excitación, crece con la mía. De pronto, todo para. El ascensor ha llegado a la séptima planta.

Me alzas en tus brazos y me llevas a la habitación, me tiras bruscamente a la cama y te reclinas sobre mi cuerpo,,, un sí mezclado con un gemido se escapa de mis labios, entretanto tus esposas rodean mis muñecas. Veo el placer en tus ojos de verme quieta, inmovilizada, sabes que haga lo que haga solo puedo mirar y sentir... me prometes que esto va a durar, vas hacerlo lentamente para que desee que todo termine cuanto antes.

Te acercas a mi lentamente sin dejar de mirarme a los ojos, disfrutando con placer este momento, tus manos rozan las mías al intentar comprobar que están inseparablemente unidas, me excito sufriendo la presión de las esposas. Mi respiración en tu oído, y me hablas rompiendo este morboso silencio … ¿te hago daño “cariño”? El sudor que corre por tú sien se pega a mis labios. Me da asco.

Se nota que estas acostumbrado a llevar el mando, tú ordenas, tú dominas… ahora, yo dominada y desnuda, expuesta a tu juego, tienes en tus manos mi aliento...
Tu silueta gira y se dirige hacia la mesa, vas hacia tu pistola… y de mi boca se escapa un ¡no!. y te provoco la única sonrisa que me regalas en la noche, mientras me apuntas entre las piernas. Tu cuerpo sobre el mío, aplastándome, tus manos arrancando mi tanga, violándome, y mis labios gritando que no. No paras, violas mi ser, violas mi cuerpo, me violas a mi. .- Dices: Mírame a la cara! ¿Ahora si percibes mi sed, mi odio? .-tu lo sabes hueles y ves mi miedo, mi terror. me contestas: ¿Hacemos esto un poco más lento? sshh... ¿sabes que el silencio es el placer de los muertos? Acaricias lentamente el arma, deslizas tus dedos por ella,, gozas del momento, y yo lo sufro. Puedo ver toda tu rabia, tu ira contenida proyectada contra mi, en forma de deseo, pero no solo deseo reflejan tus ojos, reflejan poder, emanan fuerza., rabia y excitación. Tus manos son látigos que me azotan, tu boca la antorcha que me quema, fuego que no puedo apagar con mis lágrimas, ni con mis gritos, ni con mi miedo.

El dolor en mi cuerpo y la desesperación en tu alma llegarán hasta el infinito. ... Y te perdiste en aquel sábado... hasta que quieras volver a comer la sombra que dejó mi cuerpo...

teatro sin función


mis delirios me trasladan, me arrastran al escenario de la imaginación,,
un teatro antiguo, butacas acolchadas de color burdeos, los ribetes dorados gastados por el paso de los años,
el telón echado, rasgado por el uso de las funciones, la oscuridad anega la sala,
solo unas rendijas de luz por debajo de las puertas dejan ver tu silueta acercándose por el pasillo,
tus pasos silenciosos, tu figura a mi lado, el ambiente añejo, respiración helada,
y mis ojos secos por la visión del pasado enseñan el temor de mis deseos más ocultos,
mi cuerpo reclinado sobre el tablado, semidesnudo.. con encaje negro para engalanar el momento
siento tus manos frías en mi blanca piel que se vuelve aroma para enloquecerte,
oigo cada latido de tu corazón y me hace estremecer al son de el ritmo que tu marcas,
tus caricias en mis pechos me retuercen de placer y sin mostrar mis ganas las conduzco hacia mi cuello
que espera ser devorado por tus labios y lamido por tus ansias de mi entrega,
muero por alimentarme de tu boca, sacar el dulzor y la amargura,
reventar un beso mio y esparcirlo en tus labios, quiero rozarme en ti hasta prender fuego.
tu cuerpo sudoroso se resbala por mi pálida piel, como una síntesis quimica, un compendio de poros anhelantes,
las venas de tu sexo aumentan y noto como fluye la sangre caliente por ellas,
el teatro se vuelve cálido,anuncia la esencia del éxtasis que está por descubrir, me disuelvo entre tus manos y en la textura de tu lengua me dilato, hasta sostener un grito en mi garganta, entonces..
el manjar de tu entrepierna derrama liquido en mi interior y me das tu aliento a beber.
La función a terminado,solo quedan ecos de los suspiros perdidos que no encontraron el tacto de la presencia física.

Alud


Tu me esperas ansioso, deseas escapar, pero tambien deseas tenerme.
Tu mundo lleno de contradicciones.
Tus manos tiemblan por mi cercanía. Sabemos que no puede ser, pero también sabemos que no lo podemos evitar. Es una tormenta que arrasa con todo a su paso. Es ese alud que te quema, que te destruye, que te agota. Así paso por tu vida. Y yo sólo te digo:
"Haré mi trabajo. Seré muy suave, muy delicada, muy cálida. Seré constante, seré sutil, no lo notarás. Construiré tu deseo. Lo haré alto, grande, majestuoso. Lo haré profundo, abismal, oscuro. Lo construiré ancho, amplio, que abarque toda tu existencia. Y, después, esperaré que caiga encima de mi, como un alud que me destrozará por su ímpetu, me arrastrará a lo violento de tu sexo, me engullirá con sus tres fauces, me moriré en tus brazos...y desde allí, renaceré para volverte a gozar"

de niña a mujer....





De vacaciones, en el camping con la familia, allí empezó mi primer verano como mujer:
No me asusté cuando noté la humedad entre los muslos. Pensé que el cuenco de papilla que removía entre mis piernas
desde hacía rato se había derramado, como tantas otras veces, y aparté mi falda para limpiarme, pero de inmediato
volví a cubrirme y coloqué el cuenco en su lugar, agitando la papilla que contenía con fuerza.
El pulso se me aceleró mientras me esforzaba en fijar la mirada en el cuenco. ¿qué podía hacer? Estaba sangrando.
Miré alrededor con disimulo, para ver si alguien había reparado en mi gesto.
No dije nada, me levanté cubriéndome como pude, y salí apresurada hacia la playa.
Corrí por la orilla más apartada y me senté en un lugar poco profundo, dejando que el agua me cubriera hasta la cintura. La pequeña mancha rojiza de mi falda se diluyó y desapareció en el agua turbia de la corriente. Aún mantenía el cuenco entre las manos temblorosas, cuidando de que no se derramara ni se mojase, porque mi madre me daría un sermón si estropeaba la comida de mi hermanita. Y entonces pensé qué haría mamá, cuando supiera que había comenzado a menstruar? tenía claro que mis hermanos mayores se mofarían de mi...
El sol andó rato por el cielo sin que me decidiera a salir de la orilla. Meditaba sobre mis distintas opciones pero ninguna me parecía ni un pelín protectora.
Podía lavarme a menudo, y robar alguna compresa a mi mami, pero tenía pocas posibilidades de pasar desapercibida entre mis hermanos, y un comportamiento extraño y huidizo atraería pronto la atención de mi madre que es una Sherlok...
También podía pedir ayuda a mi hermana mayor, pero seguro que duraría poco el secreto que tanto me avergonzaba. Quizás podría esperar a que se me pasará y ocultarlo hasta la siguiente menstruación y estar preparada para el momento y así mantenerlo en secreto, aunque era la peor de las opciones.
Mientras salía de la orilla y escurría mi falda llegó la curiosidad. Ahora, de pronto, las otras niñas de mi edad me parecían muy pequeñas e ignorantes.
Caminé hacia el camping, despacio, esquivando con excesivo zigzagueo ortigas y zarzales, mientras me preguntaba quién de mis hermanos sería el primero en reirse de mi, me encogí de verguenza. Sentía verdadero terror hacia los juegos que habia visto divertían a mis traviesos hermanitos. Desde pequeña conocía su comportamiento gamberro, a menudo se acercaban a las niñas cuando jugaban, buscando con insistencia bajo sus faldas, y las madres tenían que mantenerlos alejados con gritos.
Cuando divisé el camping, ya había decidido que buscaría primero la protección de mi madre para que ella dispusiera la mejor forma de llevar discretamente esa desagradable situación y asumí resignada la metamorfosís.
Al entrar en mi parcela ya habia entendido que era una mujer y ya nadie, salvo yo misma, podría cuidar mi virginidad, y con trece veranos en mi piel, me uní al juego de la sangre.

con ansias y a lo loco....



Sólo una luz inclemente, pálida e invernal, se filtraba a través de los cristales buscando con avidez los cuerpos bajo las sabanas, yaciendo en calma; cuerpos lascivos en un despertar de luz tras las sombras, abrazando suspiros desnudos.El manto de mis ansias va a tu encuentro mientras me bebes a sorbos sigilosos, llego a la cima de una sensación que me enajena, se convierte en rasguño mi caricia, en mordisco mi beso, en locura el deseo, en golpes y sacudidas el cuerpo y trato de retenerte en mi mente mientras mi piel destila el sudor que embriaga de voluptuosidad tus ojos…El ímpetu con que me penetras me hace olvidar adónde me encuentro, la brevedad de la existencia, mi nombre…Sólo quedan gemidos que me matan el alma que ya no tengo y no obstante van colmando mi ser de tu esencia.
Percibo cercano tu orgasmo, tus músculos se tensan, me deshago al notarte en mi interior y sólo puedo jadearte al oído, al recibirte embriagado de sexo, en un baile de ardor y desenfreno…Dulce hoguera en el infierno de nuestra intimidad, adonde consumirse, es solo el paso previo.

escenarios de marfil...



En este circo de sueños con colores alegres, se encuentran historias mudas después de las actuaciones,
un mundo donde realidad y fantasía se mezclan indistintamente, donde disfrutar es el único objetivo.
Un imprudente pero adorable domador, encontraba su placer con una ambiciosa y elegante bailarina, desafiando sus propios limites de una manera sexual e intensamente erótica, participaban en orgías escénicas bajo la luz del escenario y la oscuridad de la noche.
Las curvas exuberantes de ella, hacían que se perdiera en su cuerpo, en esa pista redonda que acompañaba las formas de sus figuras, ella fascinada por la seguridad que le transmitía el domador se entregaba con pasión.

Mientras unían sus cuerpos, eran observados por tres talentosos equilibristas y el audaz mago, que excitados por el acto que presenciaban se unieron a la escena.
El domador se resistió a entregar a su amante, pero el mago con agilidad consiguió amordazarlo, al tiempo que la bailarina sorprendida por la situación, intentaba deshacer sus manos de los dedos fuertes del joven equilibrista que rozaba su enorme bulto en el sexo húmedo de ella, mientras tejía sus temores... incontables manos afanosas por todo su cuerpo arrancaban poco a poco el olor de su piel y mantenían erguidos sus pezones ...
No quería respirar, ni pensar, ni existir, ni sentir, pero entre sus piernas estaban sus deseos y partía sus labios con mordiscos deliciosos de placer.
Y en los eclipses de los ojos desdichados del amante atado, brotaba una lagrima, a la vez que observaba como sus cuatro compañeros la poseían,
ella extrañada por la excitación que sentía, miraba fijamente al domador, intentando imaginar que era él quien la disfrutaba y desconocía por que extraño motivo le gustaba.
Fue una mirada, ella lo transformó todo, consiguió que la imaginación y la realidad se mezclarán en un solo universo tan imaginario como real, pretendía inventar un lugar en otro tiempo.
Y fue haciendo un nido en cada uno de los huecos vacíos, sintiendose comoda en escenarios de marfil donde poder seguir creando un mundo: SU MUNDO

fácil...



Es fácil recrearte en mi deseo.
Imaginar tus manos de curioso explorador rastreando los valles y cumbres de mi piel clara.
Evocar esa lengua cálida que lame golosa cada palmo expuesto en mi vientre de niña-mujer,
me gusta soñar esos labios siempre suaves, siempre húmedos, sé que adoras los rincones de mi cuello,,, ahora puedo, fácilmente, recrear en mi mente tus movimientos, tus gruñidos de macho embravecido,
el peso de tu cuerpo y la fuerza de tus brazos. O reconocer a ese otro tú que convive inexplicablemente en el mismo hombre, tan afectivo y tierno, tan sensitivo que tiembla de placer cuando me excito. Qué fácil me resulta imaginarte,
soñarme entregada a tu fervor cada noche,,,
solo necesito tus palabras y mi piel queda marcada de deseo,
busco estremecerme con el beso de tus letras dulces y sensitivas,
que hablan de percepciones, de escalofríos, de pieles suaves que se erizan al contacto de otra piel, de alientos cálidos y de labios entreabiertos que anhelan otra boca.
Inventas letras para mi, como dedos que pasean por mi nuca, dibujan la curva de mis hombros y bajan por mis brazos hasta entrelazarse con mis manos.
Con que facilidad tus letras juegan en mi espalda, saltando traviesas, clavándose para arrancarme suspiros de placer.
Y otras más, que suben por mis piernas, acariciando mis curvas con una delicia infinita, para seguir su camino por la cara interna de mis muslos.
Hay noches en las que me regalas letras ventosa, succionadoras como bocas que beben de mi pecho,,, tan ardientes y tan pacientes, que provocan, poco a poco, mis gemidos.
Letras húmedas como lenguas lamen mi vientre incitando mi deseo, y otras, candentes, las acompañan, y me llenan de lujuria.
Evoco las palabras jadeo, gemido, sofoco, suspiro, grito, y no razono más que monosílabos, enmarcados en signos imperativos…¡Oh!,¡Sí! ¡Ya!
Deberías saber que nada valoro más que tu divina experiencia,
por eso, hoy te pido más palabras que me hagan retorcer, suspirar satisfecha y sonreír, silenciosa y ardua cuando yo quiera, para terminar al fin, por complacerme.

alas de mariposa...



Ella lo tenía todo, juventud, belleza, dinero... Su fama en el instituto la condicionaba a cuidar su imagen, y todos los días revoloteaba como una mariposa alrededor de sus compañeros, moviéndose inquieta, probando el néctar en cada parada, saciándose de lo profundo, dejando huellas casi invisibles que al final parecen ser eternas.
Sus alas de mariposa aparentan fragilidad porque su fortaleza es un secreto oculto entre sus piernas, y en su boca hay un río de palabras que quieren salir y se mantienen en silencio... Confesiones por hacer... gritos en su interior, palabras sin sonido que se van quedando dentro,, custodia de palabras prisioneras que desean ser libres, las mantiene retenidas, para que nadie sepa lo que habla su pensamiento.Su objetivo estaba decidido desde que empezó el curso,, el nuevo profesor de matemáticas era su presa,,
Él, tan apuesto con sus canas y sus trajes perfectamente planchados, había cautivado a la soberbia estudiante.
Y aquella tarde de lluvia, al acabar las clases se ofreció amablemente a llevarla a casa,, las gotas de agua golpeaban fuerte el cristal, recordando que cada día trae algo nuevo, mañana tal vez sol... y bajo esa lluvia limpiaste tus pensamientos mas ocultos,,, maestro de amor, aprendiendo de sus manos, probando de su aliento, sintiendo en cada caricia fuego que quema el cuerpo.
No podías creer lo que te estaba pasando, tus manos temblaban, y tu corazón se agitaba,,,fue así, como quedaste enterada que entre vosotros quedaban, palabras sin decir, experiencias sin vivir momentos para revivir...
Aprendiz de todo, así te sentías, te encontraste con el más sutil y hábil maestro,, te enseñó que el placer es lo que revive, todo aquello que pensamos muerto.
Con cada lección fuiste aprendiendo, cosas que ignorabas y ahora ya eres técnica.

juego o sexo?

Hoy tengo una nueva fantasía:
Quiero que hagamos el amor en una mesa de billar. Pero deseo que no lo sepas... quiero que todo se vaya dando en medio del juego al que te invito.
Es mi turno, supones que debo pegarle a la bola número 4 pero aún no me decido.
Me miras, dices "Nena, ¿se te ha olvidado cómo se juega?" Sonrío. Aún no sabes de mis nuevas reglas para jugar. Tú estás lejos de mi, en el lado contrario. Yo, me voy acercando como quien busca un mejor ángulo. Ya, al estar a tu lado notas en mi ese gesto que ya conoces a qué invita...sabes lo que te espera.
Dejo a un lado el taco de billar y te beso... una y mil veces más, para dejarte sin aliento, con ganas de más, con deseos de mi. Vas a tocarme pero yo no te dejo. Creo que aún no es hora... solo son besos. Sé que la ansiedad aumenta la llama de tu deseo, sé que tenerte atado con una orden de "aún no" te hace vulnerable pero te gusta. Te quito la camisa.. despacio... tu necesidad aumenta: de tocarme, de besame el cuerpo, de que ese objeto que me seduce esté donde le gusta reguardarse.
Nuestras ropas están fuera, tiradas en el suelo. Tu y yo sobre la mesa. Tan juntos que parecemos uno, el deseo no cede, es hora de... ¿juego o sexo?
El tiempo lo dirá mientras improvisamos. Doy la orden "Es tú momento" estabas ancioso por escuchar mi mandato... bajo mil caricias dadas por esas manos tuyas, tan tersas, tan suaves; gimo, jadeo, sonrío, haces lo que me gusta: Me estás llevando al séptimo cielo.
cada movimiento hace sonar la mesa... creo que se va a caer...
Siento la humedad que riega dentro de mi como un riachuelo. Descanso... suspiro... pero ¡he ganado!!! Todas la bolas, desde la 4 hasta la 9 se han introducido y ni te diste cuenta.

perfume de deseo



A través de los besos penetras las estancias cavernosas del misterio, ruedas vertiginosamente hasta perderte en ella.
La dejas hacer en tu cuerpo y le muestras el rostro del amor.
Ella es la intermitente luz que te vuelve loca, te ciega, te pierde..


su piel es un continente en tus manos, y te haces agua en su cuerpo resbalandote en cada caricia,,, vapor y aroma.
Hazlo lentamente dulce exploradora, en fluctuante suavidad de tacto, con el roce impulsivo, el mimo exacto, desafiando la ansiedad que imploras.


Sinuosa, implacable, progresiva, con la elasticidad de la serpiente, rastreando la piel que te consiente y te cautiva.


Ya la tienes desnuda, entregada, entera para ti, dipuesta a dejarse saborear...


humedeces los labios para que lo sienta en los suyos.
Tu mirada es impasible y un escalofrio te recorre el cuerpo desde el dedo del pie hasta el interior de los muslos, se te erizan los pezones y los rozas con los suyos, unas gotas de hielo bajan a tu cintura y recorren el pubis, tus dedos de hielo solo le dan calor,vuelves a rozarla con tus labios porque los poros de su piel son un rio de sabores,,,


mientras tus dedos helados van clavandose dentro de ella.
Vuestros pies descalzos caminan hacía el baño.. amor bajo la ducha, jabon y besos, vestidas de agua, amor escurridizo, agua en las bocas, baile, navegación, inmersión, lluvia, espuma en los vientres, la blancura triangular del sexo.
Suave fragancia desprenden vuestros cuerpos y os bañaís en la esencia del deseo, un sabor inolvidable de intimas emociones, el toque delicado de los labios y gemidos silenciosos que despiertan la humedad de vuestra intimidad, os disolveís con el juego de las manos hasta desencadenar una tempestad convertida en océano,,,
mariposas frágiles y trémulas.

desnuda...


desnuda.. es así como me gusta..
porque de esta manera no hay tapujos ni misterios, porque mi cuerpo al estar desnudo se entrega sin trucos, sin disfraces, sin reservas...
desnuda porque..
puedo sentir tus caricias, el recorrer de tus manos por mi piel sin dejar ni un solo rincón sin acariciar
desnuda porque..
tu disfrutas vistiendo mi cuerpo con tu saliva,
y me gusta porque..
haces ver mi cuerpo vestido de tu piel y tus caricias

te has vuelto agua y no sufro nada..


Mi corazón es una antena que va de mi cabeza a tu cóxis, es un zapato untado en miel, el reloj biológico de un muerto sobre la camilla de la morgue.

Mi corazón es una taza vacía a la hora del té, un teléfono aislado, una bañera sin cortinas o un alud en el desierto de mi alma.

Ahora mi sonrisa me recuerda a un gato mirándose en un charco.

Es inofensiva, vaga, y se entristece con el sol que la derrite, y se deshace en la palma de tus manos,,,
Se que me lees,, lo se..
y que intentas nutrirme en experiencia,,, dime.. porque necesitas enseñarme la vida???
quisieras verme bucear en tus piernas con mi cabello ondear entre tus dedos,,, mi cuerpo desnudo resbalando por el tuyo es algo que repetiría sin descanso....

pero ya no habrá oportunidad,,, que facíl es tu voz en mis recuerdos,,,

ente cuerdas anda el sexo... DESÁTAME!!


Siento las cuerdas en mis muñecas, afianzándome a tu cama.
Tu boca recorre mi estómago y huye para aparecer de nuevo entre mis piernas.
Lames con ansia y yo, vendados los ojos, adivino tu presencia a través de tu aliento. La humedad de mi sexo moja mis muslos y tu barbilla. Esclavo del deseo, mi cuerpo se tensa entre tus manos. Agarras con fuerza mis pezones y pasas la lengua por mis labios.
Yo me derrito entre gemidos de impaciencia...
Desapareces, alejándote de mi tacto anhelante, para aparecer de nuevo sobre mí; tu miembro duro sobre mi vientre, ávido de humedades.Siento tu apetito latiendo en mi ombligo; desciendes y me penetras de un sólo movimiento; un grito se forma en mi garganta y escapa de mis labios, el placer es tan intenso que siento como se ensanchan mis pulmones para coger aire; mis manos no pueden tocarte, mis ojos no te ven y mi boca no alcanza a besarte; pero siento todos los rincones de mi cuerpo, cada centí­metro de mi piel, cada poro, como nunca los había percibido antes.
Mis contracciones se funden con las tuyas, rodeándose, rindiéndonos al deleite de nuestros sudores.
Sonrí­o, vencida; consagrada a un instante de pasión.

femme fatale


El tejido se ciñe, aprisionando mis pechos, marcando los pezones erectos y dispuestos, impidiéndome los movimientos bruscos, convirtiéndome en la gata negra que deseo ser para ti.
Siento en mi entrepierna el calor del látex, alimentado por mi excitación al ver cómo me observas acercarme, golosa, taladrando tus pupilas con miradas libidinosas, prometiéndote humedades, aventurándote noches inolvidables.
Las botas dejan al descubierto mis muslos, contraste de blancos y negros sin gris, suaves como la tela que cubre mis nalgas, provocativos como mis labios, enrojecidos y brillantes de deseo.
En un susurro, grave y solemne, me pides que me acerque a cuatro patas, para subir por tus piernas, mirarte desde abajo y mostrarte mi escote desde tu privilegiada posición.
Y obedezco, porque me gusta enardecerte, estimular tu imaginación y tu lascivia.
Y te inflamas de poder, pensando que obedezco tus designios cual esclava dócil y sometida.
Y no sabes que estas haciendo lo que más me gusta; ignoras que soy yo la que te guí­a a través de los caminos que me deleitan. Inocente, desconoces que eres mi siervo. Ahora y siempre que yo quiera...

solo abrazame...


Sin lugar a dudas, los abrazos son una de las mejores formas de demostrar el afecto que tenemos los seres vivos, un simple roce, o un fuerte apretón, que a veces vienen seguida por un beso o una caricia. Los abrazos son esos mimos que al recibirlos se nos eriza la piel, esos cariños que, mágicamente, pueden lograr que bajemos los niveles de tensión, que por un momento olvidemos los problemas que tanto nos aquejan, nos tranquilicemos, relajemos y entreguemos nuestro ser a aquel o aquella que nos la aplica... Una caricia no siempre implica un contacto físico, ni tampoco tiene por que ser aplicada con alguna parte determinada del cuerpo, a veces una caricia es, simplemente, un consejo, un oído amigo, un hombro cuando necesitamos ayuda, una compañía en un momento difícil, una mirada cómplice, una voz en el teléfono, una canción, un abrazo o un reto en el momento justo. Vivimos en un mundo problemático, preocupado por cosas irrelevantes, que deja de lado las cosas que realmente importan. Por supuesto, no quiero minimizar los problemas que tiene la sociedad en la que convivimos, que de por sí son muchos, pero... No creeís que si la gente se quisiera más el mundo sería menos violento? Creo que si la gente se preocupara por el que tiene al lado, tanto como se preocupa por uno mismo el mundo sería un lugar un poquito mejor. Vivimos en un mundo donde la gente, sin entrar en casos particulares, vive su vida buscando su propio beneficio, sin importarle en lo más mínimo el que tiene al lado. Las consecuencias están a la vista... No pretendo despertar la conciencia de la humanidad, mucho menos de cambiar el mundo, pero si me tomo el atrevimiento de regaláros estas caricias y como siempre, intentar dejar un momento de amor en este mundo en que vivimos.

el taller




Cuando entraste sabía que iba a suceder, te vi llegar con tu mono para ayudarme, te vi entrar en el garaje
Bajas del coche y te diriges a mí, felino y decidido, con esa mirada cargada de lujuria que me vuelve loca. Quedo a la espera de tus manos, que recorren mis muslos para liberarme del tanga y lanzarte al mar de mis muslos.
Apoyada contra el coche, sólo veo tu cabeza bajo mi falda, y sigo con la mente el recorrido de tu lengua.
Mi respiración se acelera y escapan de mis labios suspiros breves e incontrolados.
Miro alrededor, buscando ojos indiscretos que puedan observarnos, pero me puede la lascivia, y me abandono a la voluptuosidad de tus caricias, disfrutando de cada trozo de piel por el que deambulas.
Cuando al fin te das por satisfecho, y de nuevo frente a mí­ me provocas con tu mirada, y mis labios beben del sabor de mi excitación, y sabes que el vicio me ha calado en las entrañas,...
Es entonces cuando me tomas, aprisionando mi espalda contra el duro acero, siento el frio en mis nalgas, el frio mezclado en mi culo con la excitación de mi sexo. Moviéndote con ímpetu, constante y demoledor, encerrando mis gemidos entre tus dientes,
poseyéndome, sin importar el dónde, impúdico y libertino;
llevándome más allá de este garaje en penumbra, más allá de la decencia;
allá donde el placer se hace agua y los terremotos nos liberan.

dos bocas y cuatro manos




Aquella casa llena de cuartos de baño enormes y vacíos.
El crujir de la escalera de caracol, los pasos a media noche.
El viento abriendo las ventanas, las señales encendidas. Fuera, el cielo gris avanza hacia la casa, los árboles retorcidos y acechantes, la ciudad es un glaciar que nos abraza y la naturaleza muerta se mueve bajo nuestros pies.
El frío me relaja, pienso a mayor velocidad, me voy dentro de mi... he perdido mi lugar... pero encontré el tuyo en esa cama.. sin pies, sin suelo, sin techo, sin paredes.... una cama con sabanas volátiles... sabanas que se mezclan en los cuerpos, sabanas transparentes...
donde los cuerpos se mezclan sin fondos, traslucidos,, son el centro de todo, sin lugar, sin espacio.
Aquí y ahora,,, atame a la vida, al deseo, al placer. Quémame en el altar de tus manos. Fúndeme en el infierno de tus labios. Esclaví­zame entre tus piernas, quiero saborearte, recorrerte, comerte, lamerte, tragarte, morderte.
Una mano se apoya en mi hombro, suave se desliza por mi cuello, para jugar con mi pelo.
Una boca se acerca a mis labios, recorre mi barbilla y se instala en mi pecho. Otra mano sube por la rodilla, acaricia mi muslo y encuentra mi sexo.
Mis manos se agarran a tu pelo, lo masajean, lo estiran, mientras me llevas al paraíso de los amantes.
Mi boca se abre para dejar salir los suspiros que me invaden, necesitan escapar de las convulsiones que azotan mi cuerpo.
Tus ojos me miran lascivos, observan lenta y largamente mi rendición, mi placer, mi ansiedad, mi necesidad de ti.
Mis ojos están cerrados, abandonados a la delicia de saber que pronto me harás tuya.
La lujuria sube y la predicción se cumple.

Oscuridad....


sin luz... sin palabras, solo el silencio invade la habitación del Hotel en el que nos hospedó la empresa.
Cada uno en su cama, separados por dos metros escasos de suelo,, esta noche eres mi desconocido y mi obsesión,
me concentro y escucho el resonar de la camiseta con el roce de las sabanas acompañando el ritmo de tu respiración .En el ambiente olor a nervios, sudor y sexo,,,
el calor de la habitación me asfixia, no puedo dejar de pensar que te acercas a mi cama silenciosamente y en la oscuridad de la noche me besas,, espero,, oigo los segundos caer,, y me sumerjo en un mar perpetuo de fantasías... se que no duermes,,
muerdo mis labios de impotencia, de deseo, porque quiero tus abrazos. Veo tu silueta y aun no se si de mi deseo seras dueño,,,, y espero.
En la noche, tus ojos brillan y mis labios mojan la almohada donde sueño que en ti me pierdo y te encuentro, que te abrazo con mis alas... y volamos.
Consigo descifrar las señales que me da tu cuerpo, tus movimientos, tu respiración,,, lo sé, estás excitado!
te hierve la piel imaginandome entre tus piernas, mientras agarras fuertemente mis nalgas y metes tu húmeda lengua en mi.
Los dos sabemos que ninguno duerme,,, pero ninguno se atreve a decir nada... Y de pronto,,
casi me salen las palabras.. pareció resonar sin decirlo -Duermes'???? contesto?? callo?? digo?? hablo?? quien de los dos lo dijo?? fui yo?? fue el??
el silencio vuelve a la habitación, me siento confundida, ha sido un sueño'?
me giro... miro hacia tu cama y digo.. .. -No!! y espero..
y nada ocurre,,,
es ahora cuando comprendo que tu eres la sombra de tu misma sombra y yo la sombra de esa sombra.
Te conviertes en el recinto donde hoy he decidido reposar mis delirios.
Yo soy la imagen que tú no ves y tú eres la fantasía que no se realizará.
Aunque muero por susurrarte al oído: "Dejame tocarte con solo uno de mis dedos y dejaré que me beses con cada parte de tu cuerpo"

a piel abierta



Suave es la fragancia que desprende mi piel,,, en cada caricia que recibo se nutre mi ser,
libero mis sensaciones para sentir el elixir penetrando hasta en el tuetano de mis huesos,
me baño en las esencias que derraman mis amantes y desnudo con mi aliento el sabor de inolvidables e íntimas emociones.
Contengo la naturaleza en cada poro, el deseo en los labios, el dulzor en la lengua, la ternura en las manos, el cobijo en el pecho,, mis dedos dormidos y quietos como lagunas en reposo aguardan,,, mis fantasias se vierten en las ramas que teje mi pelo para entretenerse mientras la música orquésta sinfonías con el silencio.
Tengo la piel abierta de cara al cielo, empinada en el deseo, cercada por mi alma con puertas sin bisagras... me siento completa, plena, inmensa,,, siento que en mí palpitan todas las estrellas cuando pienso en un hombre, lo sueño ígneo, profundo, vivo, como un Dios y sólo mio, que arrastre mis existencias y que acaricie las esquinas perdidas mientras me piensa, que se agite como un mar violento, en las curvas más siniestras de mis urgencias, que se pasee desafiante ante mis pupilas vagas, que desaparezca en mi deseo cuando arranque de mi boca en gruño los besos.
No se que me ocurre cuando en silencio te pienso....

El sofá del motel



Mi mirada es fuego que abrasa, pero no temas, no peligra tu vida.Si tardas un poco más voy a derretirme...
el calor transforma mi respiración en jadeos incontrolados.
No sabes hasta que punto faltas tú en este sofá. También faltan tus manos en mi ombligo, recorriéndome la piel.
¿No ves mis ojos? Suplican tu presencia, lanzan gritos de protesta por tu ausencia.
¿Quieres jugar? Juguemos, no serás tú quien resista mis insinuaciones.
¿Que deseas? Te seduciré con mis labios entreabiertos, dibujando palabras que jamás me atrevería pronunciar en voz alta.
Abriré mis brazos y disfrutarás del premio que te espera si te acercas.
¿Demasiado directa? La espera no siempre es placentera, y a mí me está resultando exasperante. Acercate. Ven a mi, hoy estoy accesible, lista para ser usada.
Se que juegas con el tiempo, te gusta verme ansiosa, te acercas, y muy despacio marcando cada movimiento tuyo como un adagio, te reclinas suavemente sobre mi cuerpo desnudo.
Mi voz se escabulle en tus cabellos, como saliva flotante entre tus labios y mi respiración como susurros tras las orejas, te estremeces en mis brazos como un bebé hambriento pidiendo alimento con tus gemidos, y mi lengua va siendo la hoguera que calma tu frio.
Y como lagartijas en las esquinas del sofá nos bebemos sedientos de miradas lujuriosas, como si del último pecado se tratara... mientras la tierra se mueve y la niebla se espesa.

las chicas son guerreras


El feminismo no está acabado y no ha fracasado, pero es necesario que aparezca algo nuevo: la chica rompedora.

El feminismo nos a enseñado a ser más reflexivas y a descubrir la opresión, pero ahora se ve reducido constantemente a actuar a la defensiva y de manera reactiva.

La chica rompedora es ofensiva y activa, jamás se siente culpable y nunca se justifica.

No tolera las restricciones ni las actitudes sexistas.

La próxima vez que un tipo te toque el culo, tenga una actitud prepotente, diga pestes de tu cuerpo y, en general, te trate como a una basura, olvídate de todas las consideraciones morales, olvídate de que le han inculcado el patriarcado y él también es una víctima, olvídate de los razonamientos y el debate.

Simplemente, déjalo seco, al cabrón

Cicatres...

Hay personas que hablan y ni las escuchamos
hay personas que nos hieren y no dejan ni cicatriz
pero hay personas que simplemente
aparecen en nuestra vida
y nos marcan para siempre.